Tras el viaje a Madrid y el concierto en la Sala Siroco las diferentes maneras de entender la música que tenemos Javi, Angel y yo respecto a Javier se hicieron más patentes. Lo que para unos es algo serio para otro es un hobbie, así que antes de llegar a enfadarnos decidimos separar nuestros caminos. Poco tiempo después y tras mandar un SOS a varios amigos y grupos apareció Diego Darriba, batería de Malasombra, que se hizo cargo del puesto y empezó a trabajar con nosotros.